miércoles, 7 de marzo de 2018

Y TÚ,  ¿QUE LEES?
 
Lleva este humilde y pequeño foro inactivo un tiempo ya debido al ¿éxito? obtenido entre el mundo cofrade logroñés al que está dirigido, incluidos los dirigentes encargados de gestionar el mundo asociativo laico- pasional de Logroño.
Y digo al éxito, ya que es exactamente lo contrario. Desde el consabido y ya escuchado “no tienes ni idea” pasando por “haz otras cosas con tu vida” (como si mi vida girara solo en torno a este apasionante mundo) o hasta acusarme de depredador del patrimonio o, el más divertido, de ser el patrocinador, iniciador de diversos ejercicios de botellón en medio de un desfile procesional.
Gracias a estos emotivos y cariñosos mensajes, guardan mejores tiempos algunos artículos, recluidos en el cajón del escritorio, aunque ahora sea en un disco duro externo, en la nube y en un pincho de no sé cuantos gigas, a la vez que no escritos en papel ni con bolígrafo o pluma, si no con un procesador de textos de un ordenador de sobremesa. A los anteriormente citados “Los Enteraos” o “Quo Vadis Junta de Cofradías Logroñesa” Parte II y III, se unirán “¿Por qué se hacen las cosas mal cuando se pueden hacer bien? (Y, además, no cuesta tanto).  22-10-2016 en Logroño” y, finalmente, “Diolo y dotolo o la vuelta a Ranke. Dos siglos de historiografía olvidados”.
En una confrontación dialéctica, hubo un cofrade que, en determinado momento de acaloramiento, me espetó una frase que me hizo reflexionar. Venía a ser algo así, como “yo leo otras cosas, aparte de la Biblia”.  Y reflexioné sobre este tema. Y durante bastante tiempo. Y la pregunta que me hice fue: ¿es verdad? Y seguí reflexionando. Y decidí realizar una lista de los libros leídos desde septiembre de 2016 hasta el día de hoy. Los libros en cuestión son, por orden de lectura:
“El maestro Juan Martínez que estaba allí”   Manuel Chaves Nogales
“Juan Belmonte, matador de  toros” Manuel Chaves Nogales
“Morir en primavera” Ralf Rothman
 
 
“El fusil de mi padre” Hinerr Saleem
“Viejas historias de Castilla la Vieja”  Miguel Delibes
“La vista desde Castle Rock” Alice Munroe
“La habitación de Nona” Cristina Fernández Cubas
“Un viejo que leía novelas de amor” Luis Sepúlveda
“Sostiene Pereira” Antonio Tabucchi
“El club de los gourmets” Junichiro Tanizaki
 
 
“En la orilla” Rafael Chirbes
“Antología poética” Gloria Fuertes
“El buscón” Francisco de Quevedo
“Luna de lobos” Julio Llamazares
 
 
“Distintas formas de mirar el agua” Julio Llamazares
“Patria” Fernando Aramburu
“84 Charing Cross Road” Helene Hanff
“El salvaje” Guillermo Arriaga
“Nada” Carmen Laforet
“Carta a una desconocida” Stefan Zweig
“Veinticuatro horas en la vida de una mujer” Stefan Zweig
“Matar a un ruiseñor” Harper Lee
“Muerte de un viajante” Arthur Miller
“La casa azul” Manu Ochoa
“Mendel el de los libros” Stefan Zweig
 
 
“Luces de Bohemia”  Valle- Inclán
“Historia de una escalera” Antonio Buero- Vallejo
“Las ratas” Miguel Delibes.
“Vidas sombrías” Pío Baroja
“Don Sandalio jugador de ajedrez” Miguel de Unamuno
 
 
“Réquiem por un campesino español” Ramón J. Sénder
“Los restos del día” Kazuo Ishiguro
“La historia del rey transparente” Rosa Montero
“El sueño de una noche de verano” W. Shakespeare
“La noche de la encrucijada” Georges Simenon
“Maigret en el Picrats” Georges Simenon
“Últimas tardes con Teresa” Juan Marsé
“Seda” Alessandro Baricco
“Catalina y Catalina” Sergio Ramírez
 
Aparte de la lectura y reflexión diaria del Evangelio, leída unos casos, escuchada otros a través de rezandovoy.org
Pero también unos cuantos artículos referentes o que tengan algo que ver con la religiosidad popular en su vertiente pasional de Semana Santa. Y también libros, como no.
“Cofradía de El Descendimiento y Santo Cristo de la Buena Muerte (Valladolid). 75 aniversario de su fundación” Javier Burrieza Sánchez y Luis Luna Montero.
“La Semana Santa en la provincia palentina: historia, imaginería y tradiciones”, Guillermo Marlasca
“Gran Poder. Historia, arte y devoción” Manuel Jesús Rioldán.
“La cofradía de la Santa Vera Cruz de Zamora. Historia y patrimonio artístico” Miguel Ángel Jaramillo Guerrerira y José Andrés Casquero Fernández
“Semana Santa de Jaca y  sus cofradías y hermandades penitenciales en los siglos XVI al XIX” Juan Carlos Moreno
“Figuras de la Pasión en Valladolid” Javier Burrieza Sánchez
“Memorias de la Pasión en Valladolid” Teófanes Egido López, Enrique Gavilán Domínguez, José Luis Alonso Ponga, Javier Burrieza Sánchez.
También los artículos aparecidos en algunos blogs. A la vez que se repasan actas de diversos congresos; las del VI Congreso Nacional de Cofradías de Medina del Campo 2016, donde presenté una comunicación sobre los modelos iconográficos de Jesús Nazareno en Logroño en el siglo XX. Las actas del VII Congreso Nacional de las advocaciones de Jesús Nazareno Cautivo, Rescatado y Medinaceli celebrado en León en 2007 y publicadas en 2010. Las actas del V Congreso nacional de la advocación de Jesús Nazareno celebrado en 2014 en Puente Genil (Córdoba). Así como las del congreso Religiosidad popular: cofradías de penitencia, celebrado en El Escorial este septiembre de 2017 donde se presentaron dos comunicaciones referentes a la Semana Pasional logroñesa, por parte de D. Fermín Labarga García y por quién escribe estas líneas. La ventaja de los libros de actas es que permite, en función del interés de cada momento, una lectura parcial.
También, gracias a los cursos de formación, las publicaciones de la Conferencia Episcopal Española “La familia, santuario de la vida y esperanza de la sociedad”, “Directorio de pastoral familiar” y “La verdad del amor humano. Orientaciones sobre el amor conyugal, la ideología de género y la legislación familiar”.  Y como no y es obvio, del Papa Francisco “Amoris Laetitia”.
Y, finalmente y por motivos de investigación y posterior realización de escritos, la obra de José Antonio Pagola “Jesús, aproximación histórica”. También la de Joseph Ratzinger, Benedicto XVI, Jesús de Nazaret. Desde la Entrada en Jerusalén hasta la Resurrección”.  Y la de Ignacio Cacho Nazábal “Cristología”.
Está claro que estas últimas despacio y poco a poco ya que, al ser densas, exigen  una profunda y meditada reflexión tras la lectura.
Hecho este ejercicio, llegué a la conclusión que, no, que mi hermano cofrade no llevaba razón respecto a mí hábito lector y que leo otras cosas además de la Biblia. Lo cual, dicho sea de paso, recomiendo a todo el mundo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario