sábado, 26 de octubre de 2019

2019. AÑO NAZARENO. Postal Semana Santa Logroño



La foto corresponde a una postal de la Semana Santa logroñesa realizada por la Hermandad de la Pasión y el Santo Entierro  hacia la mitad de la década de los sesenta del pasado siglo XX. El paso del Nazareno, que dejó de procesionarse en 1968; el palio de la Soledad, aparecido en los primeros años de la misma década y el hecho de que la cofradía empezase a usar su hábito en 1969, lleva a datar la postal en esas fechas.
 Los años 60 del pasado siglo son el punto de inflexión en la evolución pasional logroñesa. Es el momento de la expansión al sur de la ciudad, dando la espalda al río Ebro, muy próximo a los límites con Álava y Navarra. Se urbaniza la Gran Vía; comienzan a aparecer en Logroño los principales servicios tanto para los logroñeses como para los habitantes de la provincia; hospital, centros educativos, edificios administrativos. Se comienza a configurar una nueva imagen de ciudad. Se comienza a dar un profundo cambio económico, social, antropológico, etc.
También se comienza a modificar el comportamiento religioso de la población. Como ejemplo, el cumplimiento eucarístico dominical en las tres parroquias con sedes pasionales apenas alcanza un 48,90%. El comportamiento pasional logroñés comienza a moverse; se empiezan a crear las primeras cofradías, en torno a los portadores de los pasos que, habitualmente, eran siempre los mismos. Así nacen las cofradías de la Virgen de la Soledad, el Santo Sepulcro, Flagelación o la de las Siete Palabras, ésta fuera de la Hermandad de la Pasión y el Santo Entierro.
La cofradía de Jesús Nazarena dará el tiro de salida a la aplicación del Concilio Vaticano II en el movimiento pasional con el paso de Narvaiza. Esta diapositiva, metafóricamente hablando, la podemos considerar como el recuerdo de un tiempo pasado del nacionalcatolicismo triunfante de 1939 y un tiempo nuevo que estaba por venir. El Nazareno Viejo, que desaparecerá en 1969, los portadores del Santo Sepulcro que incorporarán hábito nuevo el mismo año o la Dolorosa con los cofrades con los hábitos nuevos muestran lo expuesto anteriormente.


domingo, 20 de octubre de 2019

2019 AÑO NAZARENO. Viernes Santo 2003



La foto que se adjunta ilustraba, junto a otras dos, la crónica que el periódico local de aquel ya lejano año 1993 dedicaba al desarrollo de la procesión del Santo Entierro. A página completa, la crónica se completaba con una gran foto de la Soledad saliendo marcha atrás del Hospital Provincial; otra en la que se veía al popular saetero logroñés “el Chino”, además de una vista de las torres de la Redonda junto al Cristo de las Ánimas en el momento de empezar su participación en la Magna Procesión del Santo Entierro.
Los actos del Viernes Santo de aquel año eran considerados por el redactor, el recordado Emilio Ramírez, como realizados “con un enorme refrendo fervoroso”; se indica que “se iniciaban… arrastrando a cientos de personas hasta la… ermita del… Cristo de Humilladero”. Tras el “el desfile procesional (al mediodía)  desde la iglesia de Palacio” cuenta que “la exposición de pasos en la Plaza del Mercado y procesión contaron con miles de personas”.
“Dicen que la fe decrece, pero nos cuesta creerlo, ya que la asistencia a todos los actos de la Semana Santa logroñesa ha contado con mayor asistencia de público… Todos los pasos fueron expuestos en la Plaza del Mercado, que se convertía en una masificación de gentío, mezclándose cofrades, algunos cientos de tambores y cornetas, penitentas, manolas, escoltas de la Guardia Civil, Cuerpo Nacional de Policía, Policía Local, etc.”.
La fotografía, tomada seguramente el Miércoles Santo tras el Encuentro,  muestra el momento exacto en que el paso nazareno,  entraba en Santiago y la orden de arriba!!!!! acababa de ser pronunciada por el cabo de varas y los portadores iniciaban el movimiento de llevar el paso al hombro.
Como dato curioso, se observa como la maniobra, era realizada por todos los portadores con el hábito completo, capuz incluido. Será así hasta que en la primera década del siglo XXI se modifique el capuz, introduciendo el capirote que hace imposible portarlo en ese momento.


domingo, 13 de octubre de 2019

2019. AÑO NAZARENO. Cofradía Jesús Nazareno, Miércoles Santo 2007.



A día de hoy, la cofradía de Jesús Nazareno y Nuestra Señora de los Dolores no escapa a la situación general de las cofradías o hermandades en casi todas las partes de España aunque siempre hay excepciones. Se encuentran en un lento declive, casi imperceptible en ciclo de corta duración pero grande si el ciclo a estudiar es de larga duración. No es extraño ver anuncios tanto en la prensa como en las redes sociales solicitando que haya personas que se inscriban; sobre todo a la hora de portar los pasos. Logroño, Pamplona, Valladolid, Linares, etc. son solo un ejemplo.
La cofradía pasional más antigua de la capital riojana, es, como se ha dicho una más. La falta de estímulos, la falta de atención, la falta de unos programas pastorales diocesanos y parroquiales llevan al declive cofrade. No pasará mucho tiempo para que veamos en Logroño la ausencia en ka calle de algún paso por falta de gente y, posteriormente y como consecuencia de ello, alguna cofradía desaparezca. Es triste ver como casi todas las cofradías logroñesas, al procesionar, apenas tienen hermanos de fila, reduciéndose casi todos los componentes a la sección musical y a portar. Pocos hermanos infantiles, escasos mayores que ya no portan y se animan a salir. Procesiones que debieran ser esplendorosas y se han reducido a un mini paseo por cuatro calles, como es el caso del Domingo de Ramos, llevan al desánimo cofrade. Es casi seguro que el Domingo de Ramos hay más cofrades logroñeses fuera de nuestra ciudad que participando en la procesión. Entre las bandas que huyen, las programadas excursiones al Bajo Aragón o a Zaragoza, la calle se ve cuasi huérfana de cofrades. Tan solo la presencia de los alumnos de las Escuelas Pías y del colegio San José, dan un poco de nivel cofrade.
La foto corresponde al Miércoles Santo de 2007. Todos los participantes en la procesión del Encuentro de la nazarena cofradía se unieron en esta foto única. Dice Lucas (10, 1-12) en su Evangelio, que la mies es mucha y los obreros pocos. Necesitamos obreros cofrades a día de hoy para continuar con esta tradición procesional pasional y poder sacar los pasos a la calle todos los años, como continuación de la liturgia que se desarrolla en el templo. Sin este segundo escenario, la calle, donde se expresa la vivencia popular de la Pasión y Muerte de Cristo, la Semana Santa se queda coja.


domingo, 6 de octubre de 2019

2019. AÑO NAZARENO. Viernes Santo 2008



Es en la procesión donde la cofradía alcanza uno de sus momentos más importantes; todos los cofrades que lo desean abandonan la acera y se suman a la calle con el fin de acompañar al paso titular. En Logroño, el orden procesional viene determinado por cada cofradía. La nazarena comienza con su estandarte, acompañado por dos faroles. Le siguen los hermanos de filas; unas veces más, otras veces menos. Quizá sea la parte de las cofradías logroñesas a las que se les suele dar menos importancia; suelen ser cofrades infantiles que no han querido o podido integrarse en la faceta musical cofrades; cofrades mayores que ya no pueden portar el paso y quieren acompañar de otro modo a su paso titular. Le siguen los componentes de la sección musical que anuncian la llegada del paso titular. Finalmente, aparece la figura titular; ésta cobra vida sobre los hombros de los cofrades que lo portan.
En este caso se observa perfectamente como la cofradía va formando para iniciar su participación en la Magna Procesión del Santo Entierro de Logroño. Los portadores se van preparando para portar el paso. La iluminación del paso; el carril lateral, el foco que, desde la esquina de las andas, ilumina el rostro del Nazareno. Y, finalmente, los faroles puestos en las varas de carga. Viendo llegar al paso desde lejos, los cuatro puntos de luz hacen que la mirada se dirija hacia el otro punto iluminado: la cara. De este modo, el espectador, entrará en un diálogo personal con el Nazareno. La figura adquiere y explota toda la fuerza de su desarrollo plástico y artístico, abandonando el material del que está hecho y cobrando vida en el deslizarse sobre los hombros de los portadores.
La mirada, junto a la mano izquierda, que cuelga, inerte, debido al esfuerzo realizado, nos puede recordar al modelo del maestro gallego Gregorio Fernández, de la mano tendida, donde el Nazareno, se olvida de los sayones que suelen acompañar a esta advocación, para dirigirse directamente al espectador que lo contempla pasar, cada Viernes Santo por la calle de la Amargura con destino al Gólgota, donde la profecía de Isaías del siervo de Yahvé, alcanza su máxima expresión: “cuando era maltratado, se sometía, y no abría la boca; como cordero llevado al matadero, como oveja ante el esquilador, enmudecía y no abría la boca… Lo arrancaron de la tierra de los vivos, lo hirieron por los pecados de mi pueblo”.
Tras el paso, la presidencia eclesiástica de la cofradía, con su hermano prior y, flanqueándolo, el Hermano Mayor. Justo detrás, los relevos de los portadores, si los hubiera.


miércoles, 2 de octubre de 2019

2019. AÑO NAZARENO. 03-10-1968. Aprobación Nuevas Andas del Paso.



Las andas de la actual figura titular de la cofradía de Jesús Nazareno siguieron un proceso paralelo a la confección de la figura; se le encargaron al  escultor a la vez que el Nazareno, quedando pendiente de aprobación en Asamblea.
El 10 de julio de 1968 y, por doce votos contra dos se aprobó el encargo de la figura. Se sabía que las andas las iba a confeccionar Ruperto Grijalba, que solo cobraría el costo del trabajo. La madera se aportaría por donación de Domingo Ochoa. Ese mismo día se aprobó ampliar el número de cofrades hasta cuarenta y seis de los diecinueve que estaban en la cofradía, decidiéndose que cada cofrade nuevo pagara cuatro mil pesetas por dos mil los antiguos, ya que estos habían pagado anteriormente la vara a la que se accedía. También se aprobó encargar al escultor la confección de un hábito nuevo, que iría sin capirote.
El 3 de octubre de 1968 se cita a la cofradía en Asamblea General para aprobar el boceto de las andas. Asiste Alejandro Rubio Dalmati. En aquella Asamblea se comunica la baja del hermano Francisco Navarro por no gustarle el paso nuevo y estar en disconformidad con el cambio.
Comenta Eugenio Ugarte en su obra “El nuevo paso de Jesús Nazareno”, que “las andas serán de tipo sobrio con cuatro varas a cada lado capaces para cuatro hermanos en cada vara, con una longitud total de siete metros medidos de principio a fin de cada vara.  Llevarán cuatro faroles con arreglo  al diseño que también mostró  el Sr. Rubio Dalmati, y éstos (sic) faroles irán colocados en las varas. La plataforma de las andas dejará un espacio para colocar la imagen y el resto irá con unos agujeros para colocar una flor en cada uno al objeto que sea como una alfombra de flores. Alrededor de toda la plataforma irá un canal donde van metidas bombillas hasta un total de 34. Las varas serán desmontables para almacenarlas mejor durante el resto del año. Llevarán cuatro patas para poder apoyar el paso en el suelo en las paradas y de ésta (sic) forma guardar mejor el equilibrio y éstas patas irán ocultas por los faldones que rodearán las andas”.
Aquella Asamblea aprobó el cambio de las andas. Poco a poco, paso a paso, la cofradía iba cambiando su configuración.